La infidelidad en el matrimonio no tiene ningún tipo de efecto jurídico en un divorcio con hijos.
La infidelidad tendrá consecuencias en la relación sentimental como son pérdida de confianza y la deslealtad.
A pesar de ello, la idea de muchas personas que acuden a los despachos de abogados para informarse de los derechos adicionales que tienen al haber sufrido una infidelidad de su pareja o en su matrimonio, no es cierta.
No habrá ningún tipo de matiz en los derechos y obligaciones de los divorcios y separaciones por el hecho de que haya podido haber una infidelidad.
El hecho de que haya una infidelidad será algo que ni tan siquiera saldrá a colación del proceso de divorcio con hijos, ni en proceso amistoso ni contencioso. Es absolutamente indiferente que el motivo de la ruptura haya sido una supuesta infidelidad que si el motivo es cualquier otra cuestión.
Los hijos deben de quedar ajenos a las posibles infidelidades de sus progenitores y el proceso de separación o divorcio no tendrá nada que ver al respeto.
¿Se imaginan un juicio de divorcio en el que se entrara a valorar los motivos de divorcio hasta el punto de incidir en los detalles de una posible infidelidad? Sería dantesco y afortunadamente desde el año 2005 los motivos de divorcio no importan en la esfera jurídica.
Los trucos para pillar una infidelidad en su matrimonio y después poder tener medios de prueba de la misma: Fotos, mensajes, testigos… etc. Será irrelevante en el proceso de divorcio con hijos que no entrará en la razón que ha provocado la separación, sino que se centrará en la regulación paternofilial de patria potestad, guarda y custodia, visitas, alimentos y todas aquellas cuestiones que sean importantes para regular y proteger a los niños.